Ligereza es el primer adjetivo que me vino a la mente cuando vi la colección de Chloé. Tejidos fluidos y livianos son los protagonistas junto a brochazos, nunca mejor dicho, de color, con fuerza en cada uno de sus trazos.

Muchos vestidos y mucho color blanco haciendo contraste. Chalecos maxi acompañandolos. Uno de los muchos must de esta primavera-verano.

Me han encantado las carteras de mano que han presentado, como sacadas de un curso de papiroflexia.

Este me lo llevaba a mi casa. No os olvideis de meter en vuestro armario alguna prenda en azul marino.

Blusones, siempre presentes en todas las colecciones que hemos ido analizando, imprescindibles.

Mitad botín, mitad zapato, ideal tanto como para pantalón, vestido o falda. Me encanta el tacón.






Parece que los pantalones pesqueros van haciendo acto de presencia timidamente, renegados a un tercer o cuarto plano la temporada pasada bajo la dictadura de los shorts.